Comience el día con un tranquilo paseo por el casco histórico, de la mano de su pareja. Las callejuelas revelan tesoros arquitectónicos, mientras que las tiendas de artesanía y los pintorescos cafés añaden un toque de encanto a este paseo romántico. Deléitese con los sabores locales en el mercado cubierto, visita obligada para los amantes de la gastronomía.
Para vivir una experiencia gastronómica excepcional, reserve mesa en uno de los numerosos restaurantes de la ciudad. Disfrute de una cena a la luz de las velas en un marco encantador, con una vista panorámica de los canales iluminados.
Una estancia romántica en Colmar para San Valentín promete una inmersión total en el encanto alsaciano. Cultive recuerdos inolvidables en esta ciudad donde el amor flota en el aire, dejando una huella mágica en su historia de pareja.
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